En la capilla Santa Cecilia de Corrientes, el 4 de mayo será escenario de un acontecimiento de gracia para toda la Iglesia.  Por la imposición de manos del Obispo auxiliar y la oración de todo el Pueblo de Dios, Gonzalo Miguel Sotelo Riquelme, será Ordenado Sacerdote. La ceremonia se desarrollará durante la Santa Misa que se celebrará a las 10.

Gonzalo, un joven de 35 años, es el menor de tres hermanos, hijos de Miriam y Roberto, sus hermanos son Enzo y Sergio. En el año 2014, después de un tiempo de discernimiento, decidió entrar a la formación de los Misioneros Redentoristas en Bella Vista, Buenos Aires. Hoy vive este paso decisivo en su vida, iluminado con el lema: “Para que Él crezca y yo disminuya” (Jn 3, 30).

Gonzalo, ya como sacerdote Redentorista, presidirá su primera Misa el domingo 5 de mayo en la capilla Santa Josefa Rosello, a las 18.

 Sobre su camino de fe, Gonzalo recuerda que a los 10 años recibió la primera comunión en la comunidad de Santa María Josefa Rosello. Junto a esa misma comunidad, en la parroquia Inmaculado Corazón de María, a los 12 años recibió el sacramento de la Confirmación de manos de Monseñor Domingo Salvador Castagna, su padrino fue el padre Roberto Riquelme.

En torno al tiempo del Congreso Eucarístico Nacional, allá por el año 2004, comenzó a participar del Ministerio de música de la comunidad de Santa Cecilia, donde en días será ordenado diácono de la Iglesia. Pronto empezó a ayudar en la Catequesis en esta misma comunidad. Fue por entonces que el Señor volvió a hacer resonar su llamado en el corazón de Gonzalo.

En 2006 comenzó a estudiar abogacía, pero la inquietud por lo que el Señor le pedía, seguía rondando su corazón. Siguió en búsqueda. En 2010 conoció a los Misioneros Redentoristas de la Provincia Bonaerense, y en 2011 realizó una experiencia vocacional junto a otros muchachos, pero sintió que la vocación todavía no había madurado.

En el año 2014, después de un tiempo de discernimiento prolongado, acompañado por el padre Martín González, y hermanos de la  Congregación (el padre Ramón Correa y el padre Juan Pablo Roldán) decidió entrar a la formación de los Misioneros Redentoristas en Bella Vista,  junto a otros tres muchachos de Salta, Tucumán y Santiago del Estero.

En 2017 fue a vivir a Tieté, San Pablo - Brasil, junto a otros 16 muchachos de Bolivia, Chile y Brasil, para realizar la etapa más decisiva de su camino de vida religiosa: el Noviciado. Tras un año de oración y discernimiento, en 2018 realizó la Profesión de los votos temporales, y posteriormente volvió a Argentina para continuar su formación inicial, ya como religioso Redentorista.

En mayo de 2022, de vuelta en Buenos Aires, dio su “Sí” para siempre a Jesús Redentor y a la Misión, realizando la Profesión perpetua de los votos de pobreza, castidad y obediencia como Misionero Redentorista. El año pasado –2023– recibió el sacramento del Orden, como Diácono transitorio camino al sacerdocio.

Hoy Gonzalo está muy agradecido a Dios y a la Virgen, a sus padres, especialmente a su madre que alimentó y acompañó su fe. Agradece a las comunidades de Santa Cecilia y Santa Josefa Rosello que lo han acompañado con su amistad y oración, a sus hermanos redentoristas por el acompañamiento, la cercanía, la fraternidad, y por haberlo formado como religioso para consagrar su vida a la misión. Y a tantos hermanos y hermanas, que Dios bueno le ha permitido conocer, y hacerse amigos y compañeros de camino.

 

La capilla Santa Cecilia está ubicada en Cangallo y Renacimiento, en el barrio Fray José de la Quintana. En tanto, la capilla Santa Josefa Rosello, está ubicada en Nicaragua y Sucecia.