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EL PLAN COMPARTIR EN CORRIENTES:
Breve reseña histórica

El Plan Compartir se presenta por primera vez a todo el Clero en la Diócesis de Corrientes en el año 2000, en la Basílica de Nuestra Señora de Itatí, a cargo de la administración económica del Arzobispado de Corrientes, durante la gestión de Monseñor Domingo S. Castagna.

Durante los siguientes años se ha ido gestando y acrecentando en el Pueblo de Dios el espíritu de comunión de bienes (personas, talentos, tiempos y materiales ), tomando conciencia sobre el sostenimiento integral y permanente de la obra evangelizadora de nuestra Iglesia.

En el año 2009, en que nuestra Iglesia particular de Corrientes está caminando su última etapa de preparación de la celebración del centenario de la creación de nuestra Diócesis, Monseñor Andrés Stanovnik conforma el Equipo Diocesano Compartir integrado por doce miembros.

A partir del mes de marzo, el Equipo Diocesano Compartir, se reúne una vez por semana compartiendo un momento para la oración, capacitación, organización y evaluación de las actividades que se van presentando según las necesidades y realidades de nuestra Diócesis.

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No basta una buena catequesis si no va acompañada de gestos comunitarios concretos; no bastan las buenas colectas si falta transparencia. Gran parte de su eficacia depende del trabajo convergente de las diversas áreas pastorales”

“La cruz de Jesús reconcilia y une; es una fuerza que crea comunión, es señal de amor, es compartir. Cuando los cristianos nos reunimos para compartir, amamos. Cuando celebramos el sacrificio eucarístico, entregamos nuestra vida en ofrenda a Aquel que todo se entregó a nosotros”.

“Compartir significa algo que se parte y se entrega. El signo del amor del Padre que se revela en el misterio de la Cruz, es el amor del Hijo entregado hasta el extremo. Si los miembros de una familia no comparten, no se construye la unidad en la familia y ésta no progresa ni espiritual ni materialmente; y lo mismo sucede en la sociedad”.

“Amar es entregar vida, es compartirla, una verdadera vocación es la de estar destinados a compartir esta vida”

“El ser humano está hecho para amar. Amar es estar en comunión y compartir. El Plan Compartir es un instrumento que pretende facilitar el camino para que la comunidad parroquial crezca compartiendo talentos, recursos y dinero, y así fortalecer la comunión y aumentar su fervor misionero”.

Monseñor Andrés Stanovnik