PRENSA > NOTICIAS
El Sagrado Palio es el ornamento litúrgico de honor y de jurisdicción, símbolo de la oveja perdida y del Buen Pastor que da la vida por su rebaño. Es el símbolo de comunión con el Papa.
El padre Luis Molina, asesor de la Comisión Arquidiocesana de Liturgia, explicaevente la importancia de la ceremonia de imposición del Palio al Arzobispo de Corrientes y la simbología que hay detrás de este ornamento tracional de la Iglesia.
Cada año, en las Primeras Vísperas de la Solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo del 29 de junio, el Papa bendice los nuevos Sagrados Palios que son custodiados, hasta el año siguiente, en una caja de plata dorada, conservada en el llamado “nicho de los palios” en la Tumba de San Pedro, debajo del Altar de la Confesión, de donde se toman para ser impuestos a los metropolitanos.
En enero de 2015, el Santo Padre Francisco anunció que ya no impondría el palio a los nuevos arzobispos metropolitanos, sino que lo entregaría para que en ceremonias posteriores y en las propias sedes de los arzobispos, en presencia de los fieles, los nuncios de cada país presidieran las ceremonias como un signo de comunión con el presbiterio y con la comunidad.
El Papa León XIV ha decidido que las ceremonias de imposición del palio se realicen nuevamente en Roma. Por ello, la celebración del próximo 24 de septiembre en Corrientes, podría ser la primera y única vez que se realice en la Arquidiócesis.